Y cuando ardía el sol en el verano

Nos esperaban siempre allí, en Malvinas

No las islas deseadas, sino el pequeño pueblo

Que duerme al sur sanrafaelino de Mendoza

El amor siempre listo, las tardes en la chacra

Y allá  atrás los médanos guardianes

La vieja chata que parecía toser

Los perros compañeros

Los caballos

Mis primos cada uno empezando la vida

Y estaban ellos

Mis tíos

Magníficos los dos en el recuerdo

La guitarra y las frutas

La comida casera

Sin tanto amor qué triste era el verano

La vida que nos lleva por sus tiempos

Nos ha dejados a todos ya muy lejos

Pero era bueno estar acompañados

Porque allá  los sabíamos cantando

Hoy dicen que no están. Primero la guitarra

De mi buen tío Humberto cortó sus dulces trinos

Y nuestra tía Nati ahora se fue a escucharlo

Me puede la tristeza, pero entonces

Me parece escucharlos

Y vuelve a arder el sol en el verano

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